El suicidio de Akutagawa, el 24 de julio de 1927, causó gran impacto en Japón. Para unos supuso el final de una era, para otros, la prueba definitiva de una sociedad en crisis. En lo que todos están de acuerdo es que Akutagawa, junto con Ogai y Soseki, forma parte del Olimpo de la literatura japonesa moderna.
«Ya no tengo fuerzas para seguir escribiendo más. Vivir con este sentimiento es un dolor indescriptible. ¿Es que no hay nadie que me haga el favor de venir y estrangularme silenciosamente mientras duermo?»
Estas palabras desgarradoras brotan de la pluma de un hombre atormentado situado ante el abismo de una existencia que ha dejado de tener sentido. En sus últimos años de vida, Akutagawa Ryunosuke sufría alucinaciones, no toleraba la luz del sol y no podía dormir sin la ayuda de somníferos. Vida de un idiota y otras confesiones es la llave a la mente del autor de «Rashomon». A través de los relatos incluidos en este libro es posible seguir los pasos de su corta pero intensa vida: pinceladas autobiográficas, confidencias liberadoras, delirios zen, aforismos exquisitos…