El objeto de este primer volumen del siglo XIX es principalmente el romanticismo musical.
La concepción revolucionaria de la música elaborada por los poetas y por los escritores románticos a caballo entre los siglos XVIII y XIX; la influencia renovadora ejercida sobre las instituciones musicales por las nuevas condiciones políticas y sociales, y por el naciente nacionalismo; los Musikfeste,los Caecilienvereine, los Liedertafeln, y las formas que en sus ámbitos se desarrollaron o retomaron nuevo vigor (Lied coral, oratorio); la renovación profunda del teatro musical, de la ópera romántica de las primeras décadas hasta el drama wagneriano en pleno siglo; el florecimiento del Lied para una voz y piano; éstas son las líneas fundamentales del cuadro animado y recargado, en el cual destacan las figuras de los protagonistas del romanticismo musical que marcan las épocas sucesivas: Schubert y Weber; Mendelsshon, Chopin y Schumann; Listz y Wagner; Brahms, Bruckner y Wolf.
Cierra el volumen un rápido panorama de aquellas áreas periféricas de Europa que, bajo el impulso de los distintos movimientos nacionales, comienzan a adquirir una identidad cada vez más pronunciada. Entre éstas sobresale Rusia, donde en la segunda mitad del siglo la evolución de la cultura musical se desarrolla entre una atenta recepción de la música occidental y un integrismo eslavófilo radical.